Hoy os traigo una receta muy sencilla y rápida, pero a la vez muy sabrosa y sobre todo saludable, además es otra forma de comer legumbres que con este calorcito que está empezando a hacer no apetece comerlas en los típicos guisos o estofados, por eso hay que buscar nuevas formas de cocinarlas para incluirlas en nuestros platos.
Es la primera vez que hago una tortilla vegana y todo surgió de casualidad, pues yo iba a prepararme una tortilla de espinacas pero a última hora me dí cuenta de que no me quedaba ni un solo huevo así que se me ocurrió la idea de hacerla de forma vegana, ya que suelo leer bastantes blogs de recetas de este estilo (no soy vegana pero me gusta buscar este tipo de recetas porque me parece que hacen combinaciones mucho más originales y sabrosas con las verduras) y como hacía poco leí a una chica que para sustituir el huevo usaba harina de garbanzo mezclada con agua a partes iguales me lancé a probar y el resultado fué buenísimo ¡os animo a que la probéis!
Sin más os dejo con el proceso.